NO AL ACUERDO TRANSPACÍFICO DE COOPERACIÓN ECONÓMICA (TPP)

Las organizaciones ciudadanas firmantes, Red Nacional de Consejos de Salud, Movimiento Mundial de Salud de los Pueblos (MSP-Chile), Asociación Latinoamericana de Medicina Social y Salud Colectiva (ALAMES-Chile), y Colectivo Equidad-Solidaridad-Participación-Organización (ESOPO), convocan a romper el cerco de secreto y exclusión que “a puertas cerradas decide nuestro porvenir y entre cuatro paredes va dictando lo que llaman devenir” (A.Tijoux), tras la aprobación por Chile del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP); este compromete gravemente la soberanía, la garantía de bienes públicos y derechos sociales y culturales básicos de toda la población. El TPP firmado hace un mes por el Gobierno de Chile, no significaría ventaja alguna respecto de los Tratados de Libre Comercio (TLC) suscritos con cada uno de los 11 países de la zona del Pacífico en Asia y América, los cuales en conjunto representan el 40% del PIB mundial. Su sello neoliberal significa la exclusión de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), así como el bloqueo de polos de integración latinoamericana del ALBA, CELAC y MERCOSUR. Compite con una importante iniciativa financiera de China con su creación del Banco Asiático de Inversión en Infraestructuras (AIIB), a contracorriente del Fondo Monetario Internacional (FMI), de la hegemonía de EEUU y del poder absoluto de las transnacionales que concede el TPP. Estas desarrollan un intenso lobby para lograr su pronta ratificación por el Parlamento de cada país, a pesar de que ninguno de ellos ha accedido al texto de dicho acuerdo, del cual sólo se conocen algunas de sus cláusulas filtradas por WIKILEAKS. Nuestras autoridades se han apresurado en congratularse por la firma del acuerdo, sin cumplir el compromiso de levantar el secreto que rodea el TPP, vulnerando la Ley de Transparencia, el rol fiscalizador del Parlamento, el Convenio 169 de la OIT y en definitiva, la soberanía del país en general.

La Plataforma Chile Mejor sin TPP reclama con total justicia que: “No queremos un Chile atado de manos ni que firme con la vista vendada. Queremos un Chile soberano y que haga sostener sus grandes decisiones en el debate ciudadano. Este secreto, esta negociación nos devuelve a una época oscura inaceptable para la vara democrática”.

Mientras nuestro País se apresta a realizar un proceso constituyente con amplia participación ciudadana para cambiar la Constitución, el Gobierno le da la espalda a la ciudadanía y se somete al dictado del mercado y de las transnacionales. El rol subsidiario del Estado de la Constitución pinochetista se profundiza, frenando las reformas más anheladas por todos los chilenos y chilenas, como Educación Pública Gratuita y de Calidad, Salud Integral y Solidaria sin traspaso de fondos públicos a entidades con fines de lucro, y protección del Medioambiente ante la irracional penetración de transgénicos, plaguicidas y patentamiento de semillas por Monsanto, entre otros. La clausulas sobre propiedad intelectual pretenden transformar Internet en una red mercantil despojada de toda opción de conocimiento libre. Cualquier pretensión de recuperar un Estado Emprendedor, de nacionalizar los recursos naturales, o de respetar los derechos consuetudinarios de los pueblos originarios se vería severamente restringida.

La lucha en contra de la concesión de hospitales públicos enfrentaría nuevas amenazas por reglas que bloquearían su construcción por Entidades Públicas. Asimismo, la participación del Estado en la implementación de Farmacias Populares por los Municipios podría contravenir el principio de libre mercado impuesto por el TPP. El previsible encarecimiento de los fármacos por el reforzamiento de patentes, arriesga desbaratar el Fondo de Medicamentos de Alto Costo conocido como “Ley Ricarte Soto”. Además, los productos biológicos de alto impacto en el tratamiento de enfermedades como el cáncer, el SIDA, o prevenibles por vacunas, entre otros, estarán protegidos por exclusividad de datos de prueba durante 5 años, y otras medidas que prolongan la restricción de biológicos equivalentes más económicos. Con ello, las empresas farmacéuticas esperan obtener ganancias aún mayores que con el actual sistema de patentes de medicamentos. El exorbitante gasto de bolsillo en salud de Chile que supera al de todos los países de la OCDE excepto México, sufrirá un impacto profundamente regresivo.

¡¡¡Llamamos a la COMUNIDAD ENTERA A RECHAZAR EL TPP y, en especial a nuestros parlamentarios a NO RATIFICAR este acuerdo EXIGIENDO AL GOBIERNO TRASPARENTAR SU CONTENIDO!!!

 Santiago, 06 de Noviembre 2015.